Glashütte Original es la firma relojera que representa el arte de la relojería innovadora combinado con los estándares de calidad más elevados. Sus relojes son el resultado de unir la mejor ingeniería con la artesanía alemana: sofisticación técnica, precisión fiable y belleza atemporal.
Sus inicios se remontan a 1845, hace más de 175 años. Glashütte era una ciudad minera del estado de Sajonia, al este de Alemania. Al terminar con los recursos naturales de la zona, se vieron obligados a buscar otra forma de ganarse la vida. La ciudad contaba con varios relojeros y aprovecharon esta circunstancia para apostar porque la alta relojería se convirtiese en la base económica de Glashütte. Las medidas de la administración funcionaron rápidamente y comenzaron a llegar artesanos relojeros para fabricar relojes y piezas relojeras.
Con el tiempo, sus creaciones empezaron a tener renombre en todo el mundo. Glashütte Original procede de esta tradición de artesanía precisa y elegante, y sigue escribiendo la historia ininterrumpida del arte de la relojería alemana hasta hoy, siendo su máximo exponente. Para preservar estos conocimientos para el futuro, se fundó la Escuela de Relojería Alemana de Glashütte en el año 1878.
Una historia tumultuosa
Las dos guerras mundiales pusieron a prueba a los habitantes de Glashütte. Pero lejos de rendirse y estancarse, gracias a su adaptabilidad e ingenio, consiguieron seguir evolucionando su artesanía para despuntar dentro de la industria relojera mundial. Todas las empresas relojeras se vieron obligadas a fusionarse por los cambios en el sistema económico. Glashütter Uhrenbetrieb GmbH se convirtió en la sucesora legal oficial de la mayoría de las compañías relojeras que habían existido en Glashüte desde el final de la Segunda Guerra Mundial.
Internacionalización de Glashütte Original
En el año 2.000, Glashütte Original entró a formar parte del grupo relojero más grande del mundo, The Swatch Group. A día de hoy, las obras maestras de la relojería de Glashütte Original están disponibles en más de 40 países.
Glashütte Original es sinónimo de la excelencia relojera de origen alemán. La marca se enorgullece de que hasta el 95% de las piezas de sus relojes se fabrican de forma interna. Su dilatada experiencia junto a su cultura, han dado como fruto una elegancia atemporal y la sofisticación tecnológica de sus relojes.
Valores
Los valores que definen a Glashütte Original y que siempre están presente en todas sus piezas son:
Excelencia
Alemania se caracteriza por ser una de las potencias mundiales de la ingeniería. Los relojes de Glashütte Original lucen con orgullo su sello de origen «Made in Germany» y son la encarnación de la máxima precisión, fiabilidad y durabilidad.
Belleza
Uno de los principios fundamentales Glashütte Original es la belleza, tanto interior como exterior. Todos los diseños buscan la perfección y la belleza absoluta y se refleja en cada uno de sus relojes.
Exclusividad
Cada año fabrican una cantidad pequeña de relojes, convirtiéndose en piezas excepcionales y exclusivas, ya sean ediciones limitadas o superventas. Los relojes de Glashütte Original son maravillosas obras maestras que, sin parecer demasiado llamativas, subrayan discretamente la personalidad del propietario.
Modernidad
Los relojes de Glashütte Original se caracterizan por su diseño fresco siendo construcciones innovadoras. Los relojeros con más experiencia, comparten su conocimiento con los relojeros jóvenes enseñándoles el oficio. Esta unión, enriquece las piezas con su creatividad, pasión y dedicación, asegurándose que el arte de la relojería siga evolucionando en Glashüte Original.
Tradición
El arte relojero de Glashütte tiene una larga historia que se remonta a más de 175 años. Las tradiciones y las distintas experiencias del pasado de la marca siguen vivas en el actual Glashütte Original. Su importante legado se conserva a la perfección y sirve a la marca como base para dar forma al arte de la relojería del mañana.
Originalidad
El concepto de originalidad forma parte de la identidad de nuestra marca. La originalidad representa para Glashütte la autenticidad, pero también la creatividad y la riqueza de ideas.
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